Un Desayuno con Jesús - Sermón
- tefyveg
- 11 dic 2016
- 1 Min. de lectura
Lectura: Juan 21:1-10
Pastora Belkis Fernández
¿Hijitos tenéis algo de comer? Algunos de sus discípulos pasaron la noche pescando y la pesca fue infructuosa. Pedro toma la iniciativa de pescar, pero de inmediato los demás querían acompañarles. El Señor conocía las necesidades de ellos, no solo de comer en ese momento, sino que hizo el milagro de una pesca milagrosa, 153 peces. Hay una gran enseñanza en este texto bíblico, pero lo que más deseamos destacar es lo siguiente:
La actitud de colaboración de los discípulos hacia Pedro diciendo “Vamos contigo”
Todos subieron a la barca y se fueron a pescar
El milagro ocurrió después de haber pasado una noche sin pescar y cuando recibieron la dirección de Jesús hacia donde deberían de ubicarse. Hay lugares infructuosos.
No todos identifican a Jesús, primero Juan el discípulo amado y Pedro de inmediato reaccionó. Vers.7.
Pedro se viste al ver a Jesús. Actitud de disciplina y respecto
Jesús le sirvió lo mejor, el pescado más fresco, de los que acababan de pescar.
La red no se rompió, aun siendo tantos peces. Vers. 11.
Identifica a Jesús, no todos los discípulos lo identificaron, deja que te sirva y sentémonos en la mesa con Jesús, disfrutemos la comunión del cuerpo de Cristo, el cual está presente hoy y su Espíritu mora en nosotros.

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