Lectura: Filipenses 4:6-9
Pastora Belkis Fernández
¿Pueden nuestros pensamientos traer afán y quitarnos hasta el sueño? Pongamos nuestra confianza en Dios y en su soberanía para que la paz que sobrepasa todo entendimiento sea la que el Espíritu de Cristo suministre a nuestras vidas y tengamos sanos pensamientos. El apóstol Pablo después de referirse al conflicto personal entre dos hermanas de Filipos, aconseja a dejar todo tipo de afán y cuidar nuestra mente. Los pensamientos e imaginaciones negativas, traen resultados que marcan la vida de la persona, de ahí que nuestro corazón puede descontrolar nuestra razón. La construcción de nuestro pensamiento debe fundamentarse en:
Todo lo verdadero
Todo lo honesto
Todo lo puro
Todo lo amable
Todo lo que es de buen nombre
Pensar en lo que puede ser una virtud o algo digno de alabanza
Si le has fallado al Señor en tus pensamientos, o eres débil en la forma en que percibes el plan de Dios, ¿Qué debes hacer?
Pídele al Señor que examine tus pensamientos. Salmo 139:23/Salmo 26:2
Filtra tus pensamientos a través de la Palabra y recibirás discernimiento. Hebreos 4:12
Escuche el consejo para que tus pensamientos sean ordenados. Proverbios 20:18
Toma un tiempo de solitud y meditación para con Dios y con la comunidad que te dará la mano en el momento en que lo necesites.
Vendrá consuelo a nuestras vidas, te evitarás desgaste físico y emocional, podrás dormir tranquilo/a, si permites que la paz de Dios sea que gobierne tu corazón y tus pensamientos.